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lunes, 14 de julio de 2014

Ensalada murciana ¿Cómo se hace?

Como se hace la ensalada murciana

Como se hace la ensalada murciana

Preparar ensalada murciana es muy fácil. Los ingredientes que se necesitan para este plato tan típico y tan veraniego los puedes encontrar en cualquier mercado o tienda. 

Es un entrante o primer plato refrescante, sabroso, lleno de color y de texturas. La ensalada murciana es típica claro está de Murcia pero seguro que ya habías oído hablar de ella. Vamos a preparar nuestra ensalada murciana. También la podemos encontrar con otros nombres como moje, mojete, Pelechana... 

Este plato es una dura competencia para la clásica Ensaladilla Rusa. Aquí tienes la receta.





INGREDIENTES

  • 4 o 5 TOMATES NATURALES MADUROS GRANDES O DE BOTE 
  • 1 CEBOLLA TIERNA o CEBOLLETA
  • 2 O 3 LATAS DE ATÚN EN CONSERVA (SEGÚN COMENSALES)
  • ACEITUNAS 
  • 3 O 4 HUEVOS DUROS
  • ACEITE DE OLIVA 
  • SAL
  • VINAGRE
Los tomates pueden ser naturales maduros pero sin estar demasiado blandos. Si lo prefieres puedes usar tomate entero pelado enlatado.
Las cantidades de los ingredientes son relativas, según la gente que se vaya a sentar a la mesa o incluso tus propias preferencias.  


A COCINAR!!!

1. Los tomates. Si vas a usar tomates naturales como ya te he dicho que sean grandes, bien rojos, bien maduros pero sin pasarse. Los tenemos que escalfar para quitarles la piel, en la medida de lo posible retirar también las pepitas. Si se cuelan algunas... no pasa naaaada. Tenemos nuestro tomate listo, ahora lo troceamos en dados o gajos. Si usas tomate enlatado pues lo mismo te digo.

2. La cebolla la cortamos en aros y luego los seccionamos en dos o tres partes. Es un poco a gusto de cada uno. A mi me gusta pasarla después uno segundos bajo el grifo para quitarle un poco de "fiereza".

3. Los huevos. Ponemos a hervir el agua para los huevos. Ya sabéis cuando empiece a hervir el agua 10 minutos y los retiramos. Luego cuidado de no quemarte los dedos cuando los vayas a pelar. Una vez pelados los troceamos. 

4. Olivas yo le pongo de distintos tipos, según de las que tenga en casa. Preferiblemente una oliva con sabor ya sea negra de cuquillo (preferiblemente) o manzanilla. Claro que le puedes poner de distintos tipos. Es tú ensalada tu la vas a parir, tú te la vas a comer puedes hacer de ella lo que quieras. 

5. Otras cosas que añadir a la ensalada murciana, todas ricas, todas opcionales.
Guindillas, queso fresco, pepino, alcaparras, anchoas, salazones, espárragos blancos, corazones de alcachofa, maíz, lechuga troceada muy fina... No digo que todo esto lo pongáis, digo que podéis probar. Los puristas dirán que eso no forma parte de la receta original. Bueno pues nada, os doy la razón y todos contentos. La cocina es variable como el carácter de los niños, como el viento cuando voy a la playa, como el humo cuando hago una barbacoa... No me gustaría pensar que la cocina es una ciencia matemática. 

6. Aliñamos con el aceite, el vinagre y la sal al gusto de cada uno. Removemos bien sin llegar a triturar. La metemos en la nevera y la dejamos enfriar y macerar durante unas horas.
El resultado final es espectacular. Sabor, color, texturas, productos frescos... para mojar pan y no parar.

Ya tenemos nuestra ensalada de murciana ¿Era fácil verdad? 

PRESENTACIÓN

La ensalada murciana suele presentarse en un bol o recipiente circular del que todos van picando. Puedes acompañarlo de unas rebanadas de pan tostado que van a ir muy bien. Ten en cuenta que la consistencia final viene a ser como un moje. Casi una salsa.

¿QUÉ BEBEMOS?

Pues gazpacho no. Yo la acompañaría con agua fresquita o todo lo más con cerveza. Pero se admiten vuestras sugerencias. 

HISTORIA Y ORIGEN

Aunque es muy propia de la Región de Murcia la ensalada murciana, moje o mojete la podemos comer en muchas localidades de la geografía española. En algunos lugares incluso se le añade bacalao desalado o capellán, como en tantas y tantas recetas típicas de los pueblos de España. En Murcia tienen la fortuna de tener una materia prima excelente para la elaboración de ensaladas. No es de extrañar que sean unos expertos en prepararlas. 

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domingo, 4 de mayo de 2014

Coca amb Tonyina

La Coca amb Tonyina, también conocida popularmente como coca en tonyina es tradicional de la gastronomía de Alicante. Es una coca a base de ventresca de atún y cebolla. Esta es la mejor receta y más fácil para prepararla.

Ya le llaméis coca alicantina, coca antoñina, coca de atún y cebolla o coca de hogueras este plato esta siempre igual de bueno. No confundirla con la coca de mollitas, que es un tema aparte.Todo un clásico del mes de junio en Alacant, cuando las fiestas de la ciudad, Las Hogueras de San Juan / Fogueres de San Joan inundan de color, sabor y luz las calles de esta bella ciudad del mediterráneo. 



Coca amb Tonyina


INGREDIENTES

PARA LA MASA

  • HARINA DE TRIGO CANDEAL 500 Kg
  • ACEITE DE OLIVA VIRGEN 200 ml
  • SAL UNA CUCHARITA O DOS
  • ANÍS EN GRANO UNA CUCHARADA SOPERA 
  • VINO BLANCO 200 ml
  • HUEVO BATIDO PARA PINTAR LA MASA


PARA EL RELLENO

  • ORÉGANO (opcional)
  • ACEITE DE OLIVA 
  • CEBOLLA 1 kg 
  • PIÑONES 30g
  • ATÚN DE ZORRA - VENTRESCA DE ATÚN 250g
  • SAL
  • PIMENTÓN DULCE (opcional)
  • PIMIENTA NEGRA
Ya sabéis que podéis adaptar la cantidad de ingredientes a vuestras necesidades. 

A COCINAR!!!

1. PREPARANDO LA MASA
En un cazo ponemos a calentar el aceite, el vino y las semillas de anís hasta que hiervan. Puedes usar cerveza en lugar de vino blanco, incluso agua y vino en distintas proporciones según tus gustos. A mi me gusta quitarle las semillas de anís con un colador antes de mezclar con la harina.
En un bol tamizamos la harina que preferentemente tiene que ser candeal, es la harina de las masas de pizza. Añadimos la sal, una o dos cucharitas de postre. Hacemos un agujero y vamos incorporando la mezcla de aceites poco a poco. Amasando a mano o usando la maquina.  
El resultado debe ser una masa manejable. Si no te queda como quieres puedes jugar añadiendo más harina o más aceite. Dividimos la masa en dos mitades iguales. Una será para la base la otra para la tapa. Extendemos las dos partes en forma rectangular. La masa mejor si queda más fina la base que la tapa y no se agrieta. 
Debemos tener preparada una bandeja con papel de hornear para que no se pegue. Extendemos la masa sobre la bandeja y cortamos los sobrantes. 

2. PARA EL RELLENO
El relleno de la coca amb tonyina es un pisto de ventresca. La ventresca es atún y se vende en los supermercados como ventresca, atún de sorra o de zorra. Puedes usar más o menos cantidad según lo que te venga en el envase. En algunos sitios la venden en salazón osea salada, en ese caso hay que quitarle el exceso de sal. Puedes encontrarla envasada como el salmón ahumado o en bote de cristal.
Ponemos en una sartén grande un chorro generoso de aceite de oliva a calentar y doramos los piñones. Los retiramos y reservamos. 
Cortamos la cebolla en dados pequeños sin llegar a ser cebolla picada, picado una cucharita postre de pimentón dulce y un poquito de pimienta negra molida.
Ponemos a fuego medio-bajo el atún, cebolla y pimentón rojo. Añadimos sal y lo dejamos hacer chup-chup durante una hora y pico. Es un pisto. Puedes si quieres acelerar el proceso y hacerlo más rápido pero aconsejo la paciencia. Incluso bajar a fuego bajo si es necesario y alargar a dos horas. Si vas a hacerlo rápido añade el pimentón solo al final para que no se queme. El punto de sal se lo das a tu gusto. Cuando esté listo eliminamos el aceite de oliva ya sea colando o pasándolo por un chino. No digo que debas secarlo, pero no debe quedar demasiado aceitoso. Añadimos los piñones y un poco de orégano en polvo.

3. MONTAMOS LA COCA AMB TONYINA
Dejamos que el pisto de ventresca se enfríe y entonces extendemos una capa sobre la base de la coca sin llegar a cubrir los bordes que luego tendremos que cerrar con la tapa.
Colocamos la tapa encima y cerramos los bordes al estilo que más te guste: con un tenedor, un trenzado... Lo mismo te digo si quieres decorarla por encima con algún sobrante de masa haciendo rombos o cuadrados o poniendo El Plato Típico (esa decoración lleva premio). Usamos ahora el huevo batido para pintar por encima y que quede bonita. 
Por último pinchamos con un tenedor la coca para que respire o hacemos agujeritos con un palillo por toda su superficie. 
Precalentar el horno a 200 ºC pero ten en cuenta que todos los hornos mienten. El tiempo aproximado es de 40 minutos en la zona central. Si ves que empieza a tostarse demasiado por encima puedes taparla con papel de aluminio o bajar la bandeja un nivel.

Sacar del horno y dejar enfriar sobre la bandeja al menos 15 minutos.

PRESENTACIÓN

La Coca amb Tonyina es una receta típica de Alicante y más concretamente se come en la segunda quincena de junio, durante las fiestas de las Hogueras de San Juan. Es tradición acompañarla con las tradicionales "bacores" que son las brevas de la higuera. Las brevas o bacores son el primer fruto de temporada de las higueras. Son más grandes que los higos y tienen mucho más sabor. 

¿QUÉ BEBEMOS?

Cerveza, mistela o vino blanco sería el mejor maridaje para la coca amb tonyna. Y no podemos olvidar el popular y populoso Anís de Monforte.

HISTORIA Y ORIGEN

Es tradición en Alicante comer la coca amb tonyina durante la noche de la "plantá" de las hogueras. En esa noche muchos alicantinos, gente de la fiesta, pasan la noche pendientes de como va creciendo el monumento que representa a su distrito o barrio. Es un trabajo de muchas horas y la coca es el tentempié ideal para recobrar fuerzas y ánimos. En esos días casi siempre van acompañadas de "les bacores", brevas. Las panaderías alicantinas hacen miles de cocas para consumir en esas fechas (segunda quincena de junio) pero podemos encontrarlas durante todo el año en algunos lugares. También es típica en reuniones familiares, fiestas de Moros y Cristianos, peregrinación de Santa Faz o fiestas patronales... en Alicante sabemos mucho de fiestas.


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viernes, 21 de marzo de 2014

Receta para preparar Mona de Pascua Casera de Alicante ¿Cómo se hace?

Receta Mona de Pascua valenciana

Receta de Mona de Pascua valenciana

La Mona de Pascua es un bollo muy típico de Alicante. En realidad la Mona de Pascua se prepara en muchas regiones de España pero yo me voy a centrar en la receta de la mona alicantina o mona valenciana original.

La  masa y forma de prepararlo es muy parecida a la del Roscón de Reyes con la diferencia de que haremos porciones individuales y adornaremos con un huevo duro. 

La tradición de comer la Mona de Pascua está muy arraigada en Alicante y cada lunes y martes de Pascua los alicantinos nos vamos al campo o la playa a disfrutar de la familia y comernos la mona. De hecho más que Pascua nosotros le llamamos "monas" en plan... "¿Dónde vamos en monas?"

Y ahora sí, vamos con nuestra receta para preparar la mona valenciana tradicional.


INGREDIENTES PARA PREPARAR 5 O 6 MONAS DE PASCUA
  • LECHE ENTERA 125 ml
  • ACEITE DE OLIVA 35 ml
  • HARINA DE FUERZA 1/2 Kg
  • ESENCIA DE AZAHAR
  • AZÚCAR BLANCA 125 g
  • LEVADURA FRESCA 25 g (un dadito)
  • RALLADURA DE LIMÓN O NARANJA
  • 2 HUEVOS
  • ANÍS ESTRELLADO O CARDAMOMO (OPCIONALES)

A COCINAR!!!

1. Calentar la leche en un cazo y añadirle el anís estrellado o las semillas de cardamomo muy bien machacadas. El tema de el anís y el cardamomo es cosa mí. Son monas #amimanera. Solo le aportan un toque de sabor diferente. No hay que dejar que el agua llegue a hervir pero si dejarla al fuego al menos durante 10 o 15 minutos para que coja sabor. Dejamos enfriar y cuando esté tibia y esto es muy importante, no debe estar muy caliente, añadimos el dadito de levadura fresca. Si lo haces con la leche caliente la levadura se morirá y ya ni mona ni toña ni nada. 

2. Ahora en un recipiente grande,  puede ser el de la amasadora, ponemos el azúcar y la mitad del aceite y mezclamos bien. Añadimos los huevos y batimos hasta que tengamos una pasta homogénea. Añadimos la ralladura de limón o naranja y un par de cucharadas de esencia de azahar (está en muchos supermercados). 


3. Ahora vamos a añadir poco a poco la harina que tienes que haber tamizado para que quede más esponjosa. Vamos añadiendo cucharadas de harina, removemos, chorrito de leche, removemos, chorrito de aceite, removemos... así hasta que tengamos todos los ingredientes en el bol. Si usas una amasadora o batidora lo tendrás más fácil, pero de siempre se ha hecho a mano y aún no se a muerto nadie. Así que no hay excusa. ¿Cuándo está la masa lista? Cuando no se pega al recipiente y está suelta.



4. Como consejo te diré que procures que la leche con la levadura no se te enfríe por completo. Así que si prefieres aparcar ese paso y calentarla cuando ya tengas la harina lista, puedes hacerlo. Ya tenemos nuestra masa de fermentación lista. Ahora la tenemos que dejar reposar o levar, que es la palabra correcta, durante unas 4 o 5 horas. Preferiblemente en un lugar que tenga una temperatura templada. También lo puedes dejar en la nevera o en la cocina pero entonces tendrás que esperar el doble de horas a que la levadura suba. La tenemos que tener en un recipiente grande, ten en cuenta que puede subir hasta tres veces su tamaño. Tapar el recipiente con un paño mojado.

CONSEJO - Para hacer subir la masa con más facilidad puedes usar el método que uso para el roscón. Meter la bola de masa en un recipiente grande con agua templada. Se irá al fondo pero en unos minutos subirá a la superficie. En ese momento ya la sacamos y la ponemos a levar como antes he explicado... en un recipiente grande tapado con un paño... bla bla bla.


5. Pasadas unas horas verás como tu bola de masa ha crecido mucho. Ahora es el momento de partirla en los trozos que luego serán nuestras monas o toñas individuales. Para ello os aconsejo poner papel de hornear sobre una encimera y pintarlo con una brocha y unas gotitas de aceite de oliva. Ojo digo unas gotitas, lo justo para que no se pegue al papel. También te recomiendo que mojes tus manos con un poco de mantequilla o aceite, será más fácil manejar la masa y no se te pegará. Cortamos la masa (yo uso una espátula metálica) en unos 5 o 6 trozos y separa uno más pequeño para luego hacer decoraciones. 

6. Ponemos papel de hornear en una bandeja de horno y echamos un poco de harina por encima, la distribuimos con el pincel. Esto es para que no se peguen las monas al papel durante el horneado. Ahora es el momento artístico. Tienes que darle la forma que tu quieras a la mona, pero ojo, no es masa fresca no se puede manipular del mismo modo, tienes que ir con más cuidado. Yo te recomiendo que hagas círculos si es tu primera vez o las hagas alargadas con forma de barra de pan pequeña. Tienes que hacerle el hueco para poner el huevo. Una buena forma es poner ya el huevo duro directamente. Y ahora hay que volver a dejarlas levar durante unas dos horas y pico. Sobre la bandeja y si puede ser tapadas pero sin que el trapo las toque, a modo de carpa. 

7. Ya están listas para poner en el horno que vamos a precalentar a 180ºC con función arriba y abajo. Solo nos falta decorarlas. Para ello ponemos los huevos si aún no lo habíamos hecho. Con el trocito que de masa que habíamos reservado hacemos unos churritos para hacer una cruz sobre el huevo a modo de ventana. También puedes usarlos para otras decoraciones si tu imaginación te lo permite. Batimos un huevo muy bien y pintamos con un pincel todas las monas. 
También puedes poner un poquito de agua con esencia de azahar y echar unas cucharadas de azúcar para hacer un glaseado casero rústico. Pintamos con un pincel donde queramos.

Metemos nuestras monas de pascua al horno a altura media durante unos 20 minutos. Recuerda que como siempre os digo los hornos mienten como bellacos. Controla visualmente tus monas, si ves que se doran demasiado tápalas con papel de aluminio. Es más yo tendría preparado el papel de aluminio sí o sí antes incluso de meterlas al horno para ahorrarme tiempo. El tiempo del horno es relativo, pueden ser 15 o 25, los hornos son unos aparatos ingratos. Así que no te fíes. 

8. Ya están fuera del horno y la casa huele de maravilla. El aroma a monas de Pascua recién hechas es incomparable. Ahora dejamos que se enfríen y podemos seguir decorándolas como queramos. Con birutitas de colores, con dibujos de buttercream, o glasa real como las de las galletas de jengibre. O las dejas tal cual que es lo que se hacía antaño. 

VARIANTES

Todas las que tu quieras, hay muchas. Cada panadero tiene su forma de prepararlas. Pero la esencia es muy parecida a la del Roscón de Reyes. Eso sí, existen recetas como la de la mona en cataluña que no tienen nada que ver con la valenciana, aunque están igualmente deliciosas.

¿QUÉ BEBEMOS?

Un chocolate caliente sería lo ideal, leche y para los mayores místela o incluso anís.

HISTORIA Y ORIGEN DE LA MONA DE PASCUA

El nombre proviene de la palabra árabe munna que significa provisión de la boca. Era un regalo que los vasallos hacían a sus señores. La costumbre arraigó por todo el Mediterráneo. Los cristianos lo adoptaron como un postre que simboliza que la Cuaresma ha terminado.

Cuentan los más mayores en Alicante que las monas eran un regalo que hacían los padrinos a los niños cuando eran pequeños al salir de misa en Domingo de Pascua. Parece que esa tradición fue arraigando y pasaron a ser los padres los que compraban mona para los hijos y para ellos. Lo típico era ir a "comerse la mona" en los diferentes espacios abiertos que la ciudad tenía por aquel entonces: el Monte Benacantil, La Serra Grossa, la "Montaña del Huevo", el Monte Tossal. Tened en cuenta que no había coches y no era tan fácil desplazarse en familia. Se cantaban canciones, se jugaba a la comba, se volaban cometas... Existe un cuadro del artista alicantino Gastón Castelló que describe la escena a la perfección.
Actualmente la gente joven sigue organizándose para monas. Desde hace unas décadas las playas también son una zona muy concurrida esos días. 

En otras regiones como Murcia, Valencia, Cataluña y Aragón tiene su particular visión de las Monas de Pascua. Las catalanas por ejemplo son unos roscos con los huevos duros distribuidos a modo Roscón de Reyes. 

A la versión sin huevo duro se le suele llamar toña o pan quemado "panquemao".



CURIOSIDADES

Dice una tradición no escrita que tienes que romperle el huevo duro en la cabeza a alguien a traición. También existe la leyenda urbana de que que algunos panaderos ponen huevos crudos para fomentar la risa... Doy fe de ello. Las decoraciones de las monas son hoy en día muy variadas, desde la tradicional, a los míticos cocodrilos hasta monas de chocolate con los huevos coloreados...


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jueves, 7 de noviembre de 2013

Como hacer Tortilla de Patatas o Tortilla española

La tortilla de patatas o tortilla española es uno de los platos más típicos que se pueden comer en España. Es una receta muy rápida y sencilla de preparar. Existen muchas variantes de este icono de la cocina española, pero los ingredientes básicos siempre son los mismos: patatas fritas, huevo, cebolla y aceite de oliva. 

La tortilla de patatas con cebolla o sin cebolla, o tortilla española es la tapa más recurrente y solicitada en los bares españoles. El archiconocido "pincho de tortilla" acompañado de una cervecita bien fría es todo un clásico. Después tenemos los bocatas de tortilla de patatas solos o con mayonesa, otra combinación digna de reseña. 


Hoy vamos a aprender como preparar una tortilla de patatas tradicional.


Tortilla de patatas receta

Tortilla de patatas


INGREDIENTES

  • HUEVOS 4 L
  • PATATAS 500 g
  • ACEITE DE OLIVA 1 VASO
  • CEBOLLA 100 g
  • SAL

A COCINAR!!!

En cada casa tienen su propia forma particular de prepara la tortilla de patatas. Así que no quiero que nadie se ofenda ni ponga el grito en el cielo... "así no la hago yo, así no se hace"... ya, ya... pero es que cada uno tiene su forma de hacerla, respetemos esa diversidad y aprendamos para enriquecernos. 

Vamos a necesitar es una sartén anti-adherente y un plato que sea igual o más grande que la sartén. Lo vamos a usar para darle la vuelta a la tortilla, uno de los pasos más delicados de la receta. También necesitaremos una freidora o sartén profunda para freír. 

1. Lo primero que vamos hacer un buen rato antes de ponernos a cocinar es pelar las patatas. Las cortamos en pequeñas rajitas. Hay quien las corta en daditos o de forma geométrica, yo prefiero hacerlas como gajos en miniatura. Deben ser trozos pequeñitos y de poco grosor, no más grandes que un diente de ajo. Cuidado, porque si las haces demasiado pequeñas pueden llegar a deshacerse. Las ponemos en remojo en un bol grande para que vayan soltando la fécula. El agua se pondrá blanca. Ves cambiándola cada 5 minutos durante una media hora. Este paso no es imprescindible, pero la patata estará más rica.

2. Mientras preparamos la freidora. El aceite debe estar caliente cuando pongas las patatas. Mientras se calienta te recomiendo que saques las patatas del agua y en la medida de lo posible las seques. Yo las pongo en una escurridera de pasta y después las pongo sobre un paño de cocina. Las vuelvo a pasar a la escurridera (colador grande) y les pongo sal. Es el momento de freírlas.

La fritura es un paso más importante de lo que parece. No es freírlas y ya está, hay que controlar las temperaturas porque más que freír casi se podría decir que la patata se confita. Volcamos las patatas en la freidora, si no les has quitado el agua tendrás un espectáculo de gotitas de aceite, tipo fuente decorativa de los hoteles de Las Vegas nada agradable. Durante los primeros dos o tres minutos las removemos y las dejamos a fuego fuerte, después bajamos un poco la potencia y las tenemos allí durante 15 minutos. Remueve de vez en cuando para que no se peguen. 

3. Mientras las patatas se fríen ellas solitas vamos a por la cebolla, la polémica cebolla. Hay una parte de la población española que se niega a admitir que las tortillas de patata lleven cebolla. Lo que esas personas no saben es que seguramente la mayoría están viviendo un engaño continuo. Las madres, que no son nada tontas, cuando somos niños o tiquismiquis con la cebolla, la pican muy fina para que no la podamos detectar. Y nosotros decimos eso de "ves mamá, sin cebolla está más rica" y mientras tu madre sonríe. No obstante una pequeña minoría de luchadores anticebolla logran que sus patatas no incluyan este ingrediente. La verdad es que la cebolla le da un sabor diferente. Yo aconsejo usar el truco de las madres, picarla muy finita, que casi no se note. Pasados los 15 minutos ponemos la cebolla, volvemos a bajar otro poco el fuego dejándolo a la mitad. Aquí debemos dejar pasar entre 15 y 25 minutos, depende de la patata. ¿Cómo sabremos cuando apagar el fuego? Cuando las patatas comiencen a dorarse un poco. No te preocupes si se van rompiendo mientras les das vueltas. No tienen que quedar bonitas, es normal que se rompan. Cuando las tengas en el punto óptimo tenemos que escurrirles el aceite. Como mi freidora tiene incorporado un cestillo yo lo que hago es levantarlo y dejarlo así durante un ratito. Hasta que veas que no gotea aceite. 

4. Mientras se escurre el aceite de las patatas fritas vamos con los huevos. Vamos cascando los huevos uno a uno en una tacita. Si el huevo está perfecto lo incorporas a un bol. Lo hacemos uno a uno por si alguno sale mal o cae algún trozo de cáscara. Una vez tengas todos los huevos en el bol los batimos manualmente con unas varillas. Fuerte, sin miedo, que quede espumosos. Le añadimos un poquito de sal (al gusto) y seguimos batiendo un minuto más. Así le damos tiempo a las patatas para que se enfríen un poco.

5. Ahora debemos preparar nuestra sartén. Le ponemos un chorrito de aceite de oliva y dejamos que se caliente. Mientras ya podemos mezclar en el bol las patatas fritas con el huevo. Cuando el aceite esta muy caliente le volcamos la mezcla de patatas y huevo. Acomodamos con una espátula vigilando que no se queme. Si la sartén no es anti adherente será un desastre, te aconsejo que lo tengas en cuenta. Debes dejarla como mucho dos minutos. Entre el tiempo que la vuelcas hasta que pasa ese tiempo hazte con un plato lo más plano posible y vete concienciando para el paso más difícil... "darle la vuelta a la tortilla". Yo suelo usar una bandeja de pizza que me va estupendamente, pero tengo que admitir que he tenido experiencias catastróficas. Jamás, jamás de los jamases intentes hacer con la tortilla de patatas lo que con una tortita de desayuno. Lanzarla hacia arriba es la peor de las ideas que puedes tener. Te aconsejo que pasados esos dos minutos aflojes el fuego al máximo, agarres la sartén por el mango, cojas tu plato y lo pongas sobre la sartén con la superficie cóncava mirando a la tortilla (eso es de lógica pero yo lo digo). No te lo pienses mucho, se rápido y sobre todo no dudes a medio camino. Ahora ya tienes la tortilla en el plato, no te preocupes si se ha roto un poco porque aún no está totalmente cuajada. Falta el otro lado. Ahora debemos devolver la tortilla a la sartén pero antes pondremos otro chorrito de aceite. Volcamos del plato a la sartén teniendo cuidado de no quemarnos y de no destrozar la tortilla. Puedes recomponerla un poco con la espátula. Subimos un poco el fuego y esperamos otro par de minutos. 

Si cuando le has dado la vuelta la primera vez has visto que estaba un poco más quemada de lo normal, déjale menos tiempo a la segunda cara, o al contrario. Una vez que ya está cuajada hay que pasar la tortilla a un plato limpio, no al mismo de antes. 

Un consejo que os doy es que podéis darle alguna vuelta más en la sartén a la tortilla, pero ya a fuego muy muy lento o si usáis vitrocerámica con el fuego ya apagado. Así quedará más bonita. 

El punto de la tortilla tiene que ser el que a ti te guste. Hay gente que le gusta que no esté nada dorada, color amarillo, y otros que las prefieren más tostaditas. En cualquier caso, que se quede de color negro no es una buena señal. 

Ya tienes preparada tu tortilla de patatas o tortilla española

Tortilla española


PRESENTACIÓN

La tortilla se puede presentar en toda su extensión circular. La puedes cortar en porciones tipo pizza, en cuadrados y ponerles un palillo encima a cada uno. Ponerle alguna salsa tipo mayonesa, alioli, salsa picante... yo he de confesar que le pongo salsa Valentina picante. Se puede comer fría o caliente, está igual de buena. Eso sí, si no la vas a comer toda hay que refrigerarla. 

VARIANTES

Hay tantas variantes como cocineros, amas y amos de casa y pinches de cocina. La puedes comer rellena, puedes ponerle chorizo, morcilla, sobrasada, espinacas, champiñones, espárragos, ajetes tiernos, bacalao, capellán... la lista puede ser infinita. 

¿QUÉ BEBEMOS?

Eso ni se pregunta... CERVEZA, BIRRA, BIER, CHELA... si eres menor un refresco.

HISTORIA Y ORIGEN

La tortilla de patatas junto a la paella es uno de los emblemas gastronómicos populares de España. Pero su origen no está muy claro. Se dice que las primeras tortillas de patata se conocieron haya por siglo XIX durante las Guerras Carlistas. Era una forma de potenciar y rentabilizar al máximo los ingredientes que se tenían. Usando menos huevos podían tener un plato más comensales. Es muy típico que muchos de los platos tradicionales nacen de la necesidad más que de un paladar sofisticado o las ganas de innovar. 
Durante el principio del siglo XX la tortilla de patatas se fue popularizando hasta llegar a ser tal y como hoy la conocemos. 

CURIOSIDADES
  • Durante la Guerra Civil Española y postguerra, la necesidad y el hambre agudizó el ingenio de los más necesitados. Se cocinaban falsas tortillas de patatas en las que las patatas eran sustituidas por pieles o mondas de naranjas. 
  • En muchas localidades se elaboran tortillas de gran grosor, de hasta más de un palmo. No por eso dejan de estar deliciosas.

Espero que os animéis a preparar esta receta española tan típica y tradicional. No dejéis de intentarlo al menos una vez. Así nadie podrá decir que no sabéis hacer ni una tortilla de patatas.


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lunes, 16 de septiembre de 2013

Pinchos Morunos ¿Cómo se hacen?

Los pinchos morunos o pinchitos, son sin duda, uno de los platos de carne más ricos y populares de la gastronomía popular. Me sería complicado poder decir de que localidad son endémicos o cual fue su lugar de partida, pero si tuviera que elegir seguramente me iría a Andalucía. Realmente podría parecer que hacer un pincho moruno es fácil... carne, una brocheta, especias... Pero no es tan sencillo. Lo cierto es que todos hemos comido pinchos de cientos de sitios diferentes de bares, restaurantes, de la suegra, de la carnicería... y todos son distintos. Yo os voy a presentar la receta de unos pinchos que hice y para mi son los que mejor me han quedado nunca. Espero que os gusten tanto como a nosotros.





INGREDIENTES

  • 800 g DE PECHUGAS DE POLLO
  • AJO
  • SAL
  • PIMENTÓN DULCE
  • ORÉGANO
  • AGUA 1/2 VASO
  • CAYENA (OPCIONAL)
  • VARILLAS PARA PINCHITOS 
  • ACEITE DE OLIVA VIRGEN EXTRA

Lo principal para que un pincho este riquísimo es que la majada (adobo) sea bueno y tengamos paciencia con el tiempo. 

1. Ponemos 3 dientes de ajo en un mortero y machacarlos bien. Tiene que quedar casI como una pasta. Añadimos 1 cucharadita de sal, 3 de pimentón dulce, una cuchara grande de orégano. Removemos todo bien y le añadimos el agua. Si te gustan más picantes (yo tengo una mexicana en casa), puedes ponerle también cayena, yo uso chile rojo de árbol que nos trajeron de México.

2. Cortamos la carne en tacos, más o menos de 3x3 centímetros. Los ponemos en un recipiente, yo uso un bol. Le echamos por encima el adobo que habíamos preparado y un chorrito de aceite de oliva virgen extra. Lo tapamos y lo metemos al frigorífico. 
En este punto es donde hay que tener paciencia y previsión. Lo ideal es hacerlos de un día para otro. Contra más tiempo estén en remojo más ricos estarán. Pero... con 3 o 4 horas ya están estupendos, doy fe. 
Acuérdate de mover la carne cada media hora más o menos para que todo quede bien impregnado. 

3. Tienes dos opciones, pincharlos en las varillas antes o después. Yo los pincho antes y los suelo hacer en una plancha, los hago allí por pura comodidad. Si tu prefieres hacerlos en la sartén o en el horno el resultado será muy similar. Si los haces en la sartén pones el fuego a calentar a fuego medio alto. Pones los pinchos morunos y los riegas con un chorrito de aceite de oliva más. No uses el jugo que te quedó para mojarlos, porque se te cocerán y no quedan igual. Mejor lo usas al final, cuando ya estén terminados. Calientas el adobo que habíamos usado y con una cuchara los mojas un poco. Pero eso ya es al gusto de cada uno.

PRESENTACIÓN

Los pinchos morunos son un plato original por si solo. En un plato llano o bandeja, con una buena guarnición de patatas fritas o bravas. 

QUE BEBEMOS

Pues una cerveza sería estupendo. Así podemos transportarnos a esa terraza del bar de tapas que más nos gusta, o aquella otra en la que estuviste en vacaciones... los pinchos me evocan vacaciones, verano y también las barbacoas que hacían mis padres en "el campo de todos" junto con morcillas, chorizos, panceta... mmmm... con el pan de pueblo... y las patatas a la brasa. Vale... ya basta! ¿Veis como tengo razón cuando digo que es un plato evocador de recuerdos?



ORIGEN

Podríamos pensar por el nombre que el origen es árabe. De hecho en gran parte del norte de África puedes encontrar platos muy parecidos. Pero los pinchitos morunos llevan tanto tiempo entre nosotros y les tenemos tanto cariño que diremos que son ibéricos. Una cosa si es cierta... los puedes hacer de pollo, de cordero, de ternera... pero no de cerdo ¿Será por la costumbre musulmana de no comer cerdo? Es  posible, pero en realidad lo que pasa es que no quedan igual de ricos, no combina igual de bien que con las otras carnes. 






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sábado, 14 de septiembre de 2013

CÓMO HACER TURRÓN BLANDO CASERO

Dicen que "la cabra siempre tira p'al monte", será por eso que me encantan las recetas de mi provincia. Además en este caso es una receta de la que podemos sentirnos bien orgullosos, porque es conocida en el mundo entero. El Turrón es imprescindible en cualquier mesa durante la Navidad. Pues además de ser muy típico, muy antiguo y muy famoso... es muy fácil de preparar en casa. Así que ahora que aun hay tiempo para que lleguen las fiestas navideñas podemos empezar a practicar para saber como hacer nuestro propio turrón blando. En este punto vamos a diferenciar entre turrón duro o de Alicante y turrón blando o de Xixona.
Yo voy a enseñaros como se hace el blando, del duro ya me encargaré la semana que viene.
Bueno... VAMOS AL TURRÓN!! (no he podido resistirme a decirlo)






INGREDIENTES


  • 100 g DE AZÚCAR POLVO
  • 150 g DE MIEL MILFLORES
  • 250 g DE ALMENDRAS TOSTADAS MOLIDAS
  • 50 g DE ALMENDRAS ENTERAS TOSTADAS
  • 1 LIMÓN (UNA CUCHARITA DE RALLADURA) opcional
  • CANELA opcional
Con estas cantidades tendrás para dos o tres pastillas normales de turrón. Si quieres hacer más o menos solo debes adaptar la cantidad de ingredientes, no hay problema. Si no tienes miel milflores puede ser de cualquiera. La almendra entera preferiblemente debería ser de la variedad marcona (alicantina). Puedes tostarlas tu mismo en casa. 

AL TURRÓN!! (bis)

1. La almendra es una de las claves para hacer el turrón. Normalmente los turroneros usan almendra de la variedad marcona, que es muy típica de la provincia de Alicante. 
Yo recomiendo comprar las almendras crudas osea 300g. Las tostamos en una sartén con mucho cuidado porque se pueden quemar. Hay que moverlas constantemente para que eso no pase y queden doraditas. Separamos un puñado que usaremos para dejar tropezones y trozos más grandes y el resto las molemos hasta dejarlas casi como una harina o pan rallado muy fino. 

Con las almendras enteras haremos lo siguiente, las vamos a triturar en trocitos pequeños de distintos tamaños. Eso es cortarlas con un cuchillo en varios trozos para que no queden todas igual.
Bueno dicho esto... Al turrón!! 

2. Ponemos en un recipiente apto para cocinar la miel y el azúcar glas. Templamos a fuego medio bajo y vamos removiendo la mezcla para que se disuelva el azúcar. Puedes cambiar la cantidad de miel para que te salga más seco o menos, y la miel da igual la variedad que sea pero contra más espesa mejor. 
Opcionalmente puedes añadir un poco de canela y ralladura de limón a la mezcla. Pero es un poco a gustos de cada uno.

3. Mientras está templada la mezcla añadimos las almendras, tanto las molidas como las troceadas removemos bien durante un par de minutos a fuego bajo y reservamos. Cuando se haya enfriado un poco amasamos con las manos hasta que se forme una masa homogénea. En este punto puedes probarlo de sabor, aún estás a tiempo de añadir alguna especia o un toque personal.

4. Ahora hay que enmoldar la masa. Podéis usar un recipiente cuadrado cualquiera, hacer uno de madera a medida o usar incluso un cartón de leche partido por la mitad. 
Ponemos una servilleta de cocina o papel absorbente de fondo, después forramos el interior con papel de hornear y dejamos que sobresalga por arriba para luego poder taparlo por la parte superior. En la parte superior ponemos otro papel de cocina. El tema del papel de cocina es para eliminar el exceso de aceites. Ponemos un peso encima, que puede ser un cartón de leche o dos para que compacte la masa. La metemos al frigorífico y la dejamos allí durante unos días. Pero vigílalo a diario para ver como evoluciona. Si tu nevera es "nofrost" es posible que se quede más duro. Contra más días esté más compacta quedará la masa. 
Una vez al día hay cambiarles las servilletas, la de abajo con mucho cuidado para no romper el turrón. 
Cuando cambies las servilletas puedes mirar como va de consistencia y si está en un punto que te gusta ya lo puedes sacar. Al ser un turrón casero lo ideal es consumirlo en poco tiempo. 

CONSEJOS Y CONSIDERACIONES

- No es sencillo que esta receta salga bien a la primera. Si no te queda perfecto de primeras tienes que tener en cuenta que hay ciertas variables que son difíciles de controlar. 
- Te recomiendo que al menos un par de veces al día compruebes como va el turrón. Si se seca demasiado y está muy duro termina antes el proceso. Si por el contrario queda más blando es porque tiene exceso de humedad.
- Ten paciencia y sobre todo ten en cuenta que el turrón comercial se hace con máquinas especiales que no tenemos en casa. A mi no me salió bien ni a la primera ni a la segunda, pero fui rectificando hasta encontrar el método. Me pasó igual con las lentejas... o la fabada. Paciencia, tolerancia a la frustración y ánimo.

PRESENTACIÓN

Ya habéis visto que fácil y sencillo es hacer tu propio turrón blando o de Jijona en casa. Lo sacamos de la nevera y lo partimos en pastillas o porciones. Ya está listo para comer.




¿QUÉ BEBEMOS? 

Una mistela, o ya que estamos en Alicante un Cantueso. Un vino dulce le va genial, aunque el cava y la sidra también son muy utilizados con el turrón. 

VARIANTES

El turrón es en esencia, almendra, miel y azúcar. Todo lo que le añadimos después se pueden considerar variantes. Para el turrón blando hay quien lo mezcla con más frutos secos como avellanas y piñones. 

ORIGEN

No hace falta ser un genio ¿Verdad? Es un dulce de origen árabe. En Alicante se tenía mucha tradición porque es tierra de almendros y más concretamente de la variedad marcona. Que es ideal para este tipo de postres dulces. Existen referencias escritas del turrón desde el siglo XI. Estas sitúa el origen del turrón en la península arábiga. En aquel entonces se le conoce como "turun". En España se populariza desde el 1500 dC en la Provincia de Alicante, en la capital (donde yo vivo) y en Jijona. Existen documentos que acreditan que a los trabajadores de Alicante, durante el mes de Navidad les pagaban parte de su salario en forma de turrón. Ese es seguramente el origen de lo que hoy conocemos como "la cesta de Navidad". Con la llegada del cacao de América también llego el chocolate y en Alicante se dejó de elaborar turrón. Solo Jijona mantuvo esa tradición. A partir del siglo XVIII comienzan a elaborarse otras variedades como el guirlache. 
Actualmente el turrón sigue muy vivo y tiene su propia denominación de origen. Aunque muchas más marcas pretenden vendernos chocolatinas como "turrón de chocolate". Si no lleva almendra y miel no es turrón, son engendros publicitarios que aprovechan la campaña de Navidad y el buen nombre de este dulce para hacer su negocio ¿Se nota o no se nota que soy alicantino? Mira que me pongo a cantar el himno del Hércules en menos que canta un gallo eh! 
Espero que os guste la receta y que intentéis hacerla en casa, es muy sencilla. 
La semana que viene pongo la del turrón duro, lo prometo.